La Asociación
de Familiares de Presos Políticos, Desaparecidos y Víctimas de Genocidio
(AFADEVIG) nos dirigimos al pueblo peruano y a la opinión pública para
denunciar la infame pretensión del Estado peruano y el gobierno de negarnos el
derecho a enterrar a nuestros familiares llegando al extremo de pretender
demoler el lugar construido con nuestros propios esfuerzos para darles una
digna sepultura.
Somos familiares
de los prisioneros asesinados hace 30 años en los penales de El frontón,
Lurigancho y Callao, 250 en un solo día. Nunca nos entregaron sus cuerpos; porque
los volaron, los quemaron y los restos fueron secuestrados amontonándolos en
fosas como NN en diferentes cementerios, y, desde hace 15 años sus huesos
permanecen en cajas de cartón en las dependencias del Ministerio Público; y
cuando 30 años después hemos podido recuperar 7 cuerpos y los hemos enterrado
en unos nichos construidos con nuestros propios esfuerzos, 3 meses después, la
DIRCOTE ha orquestado una campaña movida por protervos intereses políticos y
buscando levantar su alicaída imagen por denuncias de conformar escuadrones de
la muerte y corrupción. A esto se suma los intereses de la facción más
conservadora de la gran burguesía peruana que ha presionado, llegando el propio
Presidente de la Republica a expresar públicamente que “se saquen los
cadáveres” y se “demuela el mausoleo” violentando los principios democráticos
del cual dice ser abanderado; quien mientras saluda el Acuerdo de Paz en
Colombia, aquí en el Perú pide se saquen los cuerpos de nuestros familiares y
se demuelan sus nichos, actuando como si estuviéramos en tiempos de dictadura
abierta.
A todos los
peruanos nos asiste los derechos fundamentales establecidos en la Constitución,
nosotros como peruanos también tenemos los mismos derechos, y no se nos puede
discriminar. Tenemos el legítimo derecho de enterrar a nuestros muertos y enterrarlos
conforme a nuestros ritos y costumbres. No hemos lesionado ningún bien
jurídico, no hemos atacado a nadie. ¡No hemos cometido ningún delito! ¡Enterrar
a nuestros muertos no es delito! Hacer romería para enterrarlos tampoco como
mendazmente propalan algunos medios de comunicación usando el inexistente
“rebrote del terrorismo” para hacer consentir al pueblo y a la opinión publica
la necesidad de una represión contra nosotros sus familiares, sus amigos y
abogados.
Responsabilizamos
al gobierno y a la policía política de nuestra vida, integridad física y de
nuestra libertad.
Querido
pueblo acudimos a ti nuevamente para pedir tu apoyo solidario porque solo con
tu fuerza y aliento contamos, para cerrar el paso a esta ofensiva reaccionaria,
hoy lo hacen con nosotros, mañana lo extenderán a otros hijos del pueblo.
AFADEVIG
25 de septiembre de 2016
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